En un emocionario permanente de canciones que marcaron una época, se presentó el Grupo Let It Be en el Gran Teatro de Cáceres, en un espectáculo musical que podemos considerar de excepcional, por la magnitud de su elenco, repertorio y dificultades de montaje, empeño y trabajo de su director, José Luis Arroyo, que ya lleva a sus espaldas, varias ediciones de estos concierto, en los principales foros de Extremadura , incluido el Teatro Romano de Mérida.
Arroyo no solamente produce, además, dirige los ensayos de todas las secciones del conjunto , que estás compuesto por 50 músicos en sus diferentes apartados: cuerda, viento, percusión y un coro de 20 voces entre sopranos, contraltos y tenores y dos cantantes solistas. Y Arroyo, dirige en escena como guitarrista principal.
La formación está compuesta por amateurs y profesionales ya que cuenta con varios profesores de conservatorio.
Un repertorio que- aunque constituido especialmente por temas de Beatles- no deja de lado a otras figuras de la música pop que marcaron una época como Simon and Garfunkel, Gerry Rafferty, Queen, Moody Blues, Magna Carta, salpicando con algunas gotas de intimismo a base de temas de Linda Ronstand, Sarah Brighman...
Dos horas de concierto, con un público entregado , en el ambiente de recinto que, actualmente, combina la modernidad de su escenario con el toque clásico de sus plateas .
Fue noche de esas que se guardan en el itinerario sentimental no sólo por los recuerdos que evocan, también por que nos deja patente que la música -en todos sus aspectos- es algo que cuidar y mantener- es el aceite que engrasa todo progreso humano y no siempre se tiene en cuenta.
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